jueves, 17 de junio de 2010

Arteterapia

Taller de Pintura



El hacer pintura con la modalidad de Taller reconoce un espacio de relación, un espacio para la reflexión y el encuentro consigo mismo, en esta situación la persona descubre y asimila los saberes técnicos y artísticos y al mismo tiempo los experimenta en su hacer creativo. Con respecto al espacio en el que se desarrolla el taller, al principio puede parecer impersonal, pero se va transformando en un lugar personalizado y significativo, en el que se comparten con otras personas nuevas experiencias, logrando transformar la relaciónes de estas con los demás.

Pintura Salud Mental


El uso de diferentes expresiones artísticas como vehículo para corregir desórdenes emocionales y mentales viene siendo utilizado con eficacia desde hace más de medio siglo. En esencia, la arteterapia pone al servicio del paciente un tipo de lenguaje no verbal con la capacidad de desbloquear y liberarle de estados potencialmente dañinos, ayudándole a restaurar el equilibrio perdido.
No resulta desacertado que muchos expertos hayan establecido paralelismos entre la terapia artística y el psicoanálisis, incluyendo al propio Freud, de manera que se intenta que el sujeto exprese cosas que verbalmente es incapaz de hacer, bien por formar parte de su mundo inconsciente o por el rechazo que le genera el asunto. El arte expresivo tiende un puente entre el interior del ser humano y el exterior, un camino por el que pueden transitar sin la intervención de la razón, los prejuicios los complejos, las emociones y sentimientos más diversos. La cuestión es muy simple, pues sólo requiere de material de dibujo, en contraste con los excelentes resultados que puede brindar al paciente. La asistencia de un terapeuta u orientador suele ser importante, pero existe consenso en que el especialista nunca interpretará los productos artísticos, ni en lo relativo a su calidad ni en lo concerniente al contenido que tienen. No en vano, en esta terapia el único que tiene capacidad para interpretar el material es quien lo genera, en tanto y cuanto se trata de productos individuales e intransferibles, de contenidos íntimos en un lenguaje que el paciente aprende a interpretar, haciendo uso de lo que su corazón le indica. Aunque atender a la intuición y a la voz del corazón parece algo fuera de la ciencia y la medicina, lo cierto es que la inteligencia intuitiva está cada vez más reivindicada por la ciencia actual. Conviene que antes de continuar el lector sepa que en la terapia con artes plásticas no es importante el talento, puesto que con frecuencia cuando uno es un profesional tiende al perfeccionamiento, enmascarando el mensaje. Simplemente hay que dejarse llevar.